24 septiembre 2012

MENTE Y VIDA

NI DE NOCHE NI DE DÍA



Cada mente una vida.
Con el paso del tiempo 
Unas guardan sus recuerdos
en un rincón amurallado,
perdiendo la llave
de la existencia vivida. 

Otros perciben que su camino se acaba,
 dejando que su mente elija.
¿Con que realidad te quedas?.
¡La soñada, la vivida! 
¿las mezclas, tal vez,
para no ahondar en la herida?. 
¿Para olvidar los errores, 
utilizas tus mentiras?.

  Tu mente, ya no entiende 
de verdades inventadas o vividas,
 se deja llevar sin mas, 
por el resto de tus días.

Pero ahí.... 
en el rincón de las emociones, 
que un día te gobernaron, 
brotan como resorte,
gritando contra los que están mas cerca.

Sale la rabia, el coraje, 
levantas tu mano 
contra aquellos que tienes al lado,
los únicos que te hablaron claro,
que no te adoraron en tus idas y venidas,
 los que se sintieron humillados 
con tus bromas maliciosas....
 ¡utilizados, en tus deseos 
de hacer tu propia vida!.

Aún te preguntas. 
¿Porque me fui tan temprano?.
Juzgas los asuntos ajenos, 
sin haber sufrido en tus carnes
 semejantes tormentos.
Olvidando tus actos,
  los peores momentos 
que los tuyos padecieron.

 Exigías y exiges derechos, 
¡aquí estamos! 
No por obligación,
  por que somos humanos.

Ahora, ya es tarde para ayudar a tu cuerpo, 
pero siento cada día, 
como me llamas desde dentro. 
Tu alma todavía esta a tiempo.
No olvidemos que aun estamos,
a este lado del espejo.

El respeto no lo dan los años, pero si los actos.

6 comentarios:

  1. ¡Efectivamente! El respeto no lo da los años de la persona, lo da aquello que día a día se va acumulando, es como si se guardara en una mochila. Triste aquél que no se dé cuenta de ello, porque al final de su vida no encontrara una mano amiga, ni tan siquiera se podrá mirar en ese espejo que siempre ha tenido enfrente porque solamente le devolverá el dolor que halla sembrado.
    Abrazos querida amiga, y, simplemente un poco de paciencia demostrando siempre el amor que les tenemos.

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  2. Con lo fácil que sería ir de la mano amiga, si fuésemos capaces de dejar de ser tan interesados. Cuanto tenemos que aprender todavía. Besos.

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  3. Anónimo20:46

    Querida Mercedes, te felicito por este grandioso poema escrito desde lo más profundo del corazón, mi alma ha vibrado y sentido el mensaje que quieres transmitir con estas hermosas letras.Un abrazo enorme

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    1. Gracias por tu comentario anónimo, Un abrazo.

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  4. Nadie debería exigirnos nada, y menos aún quien nada está dispuesto a hacer por los demás, sin embargo en el mundo abundan ese tipo de personas, las que consideran que todo se les debe por derecho divino o por su cara bonita, y no importa cuánto des, o cuánto tiempo o esfuerzos les dediques, siempre considerarán que no ha sido suficiente, esas personas además, tienden a confundir humanidad y generosidad con servilismo y estupidez.

    Una pena, pero así es.

    Besos

    Te dejo un poema que escribí hace algunos meses con este tema.

    Nos falta el pan
    la migaja
    y el centeno
    y aun así
    compartimos con ajeno.

    Nos sobra el alma,
    los sueños,
    la armonía.

    Nos sobra el corazón
    el coraje
    y la osadía.

    Nos sobra humanidad
    compasión
    y cofradía.


    Les falta caridad
    discreción
    y la empatía
    y aún así
    beatifican su herejía.

    Les sobra el fuego rojo
    o el veneno,
    que inyecta sangre
    a la pasión
    y al desenfreno.

    Les sobra ambición
    avaricia
    altanería
    soberbia
    orgullo
    y cobardía.

    Y añaden a todo
    la porfía
    de acusarnos
    de ingenuos
    de sencillos
    de incautos
    sin valor
    sin artificio
    sin talento
    sin ingenio
    y sin primor.

    Por eso con dureza
    y con rigor
    nominan servilismo
    a cortesía,
    devuelven a humildad
    humillación,
    visten su vanidad
    de hipocresía
    y ponen por testigo
    al mismo Dios
    de su buena intención
    y su fratría.

    No es extraño con tanta brujería
    que ande dolorido el corazón
    y se vierta en tan profusa letanía.

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    1. Bello poema, brillante alegato de la realidad del ser humano.
      Magnifico! gracias por hacérmelo llegar.
      Un abrazo.

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