La vida tiene veredas, en el camino vamos tropezando con piedras, en vez de
apartarlas las amontonamos y arrastramos; cuando nos queremos dar cuenta, el
peso nos sobrepasa y tapa cualquier resquicio de fuerza o esperanza.
Dejemos la
carga antes que se muestre tan pesada y difícil de llevar...
A veces, el mundo que se ve es este...
Y tu alma, refleja tu interior...
A veces, el mundo que se ve es este...
Y tu alma, refleja tu interior...
¡ASÍ TE VEO YO!
Como
escarcha encima de iglú.
En un frío
invierno polar.
Así me
llegas tú.
Tristeza,
lamentos, dolor
conviertes en rabia, coraje y frustración.
Las sombras
que escondes, oscurecen tu alma
Cual cortina
de tenebrosa y densa niebla.
Los espejismos te atormentan
Instantes
que multiplicas en cien vidas de existencia.
Invierno... congela todo lo que tocas.
Sin dejarte
ver la luz,
Arremetes contra el mundo
Ese mundo, que solo puedes ver tú.
Tu espíritu malicioso, te martiriza a cada paso
Y entre tus
labios afilas los cuchillos de dos hojas
Puliendo con
alfileres, directo a tu corazón.
Tus
fantasmas te persiguen...
Finos témpanos te clavan...
Sin
percatarte siquiera, que con el calor; se funden.
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