Difícil comprenderte, en esta vida ciega y sorda
Difícil sentirte, entre tanta hipocresía
Difícil
entender tanto castigo, mentira e injusticia.
Cabalgo entre las estrellas, buscando una
salida
Las nubes, me
acompañan en cálido abrazo
Hasta el demonio
me mira con sonrisa sarcástica
Asombrado del
hombre y su destino.
Busco,
medito, converso contigo.
Me quedé
perdida en tu laberinto.
Sueño con un
mundo justo
Pero... no hay
justicia en este mundo.
Dicen que
aquí se viene a pagar el pasado
Y pasan de
largo; ya conocen su supuesto destino
Si así fuera, será qué solo tengo que mirar por mí...
y todavía no lo he entendido.
Qué padre no
mira por sus hijos...
Cada vez
somos más y mal avenidos.
Acaso, esto
es el cielo y los ladrones,
Los ángeles
guardianes del paraíso.
Los fantasmas, se pasean entre los vivos.
Ellos no
abrazan, solo dan frío...
O, solo estoy
equivocada y ya estoy en el infierno;
Pues aquel que tu llamas el ángel caído,
Mira con una
mueca por sonrisa y me grita...
¡Lo siento!... ¡en
el infierno, no me queda sitio!
La propia vida es un sarcasmo o ¿No? Yo he dicho en alguna que otra ocasión que este mundo es el infierno. Que pasamos por él para ganarnos algo mejor pasando por una criba. La justicia brilla por su ausencia, pero no me refiero a la justicia de los juicios, no, sino a esa otra "JUSTICIA" con letras mayúsculas ausente en las enormes desigualdades que padece la humanidad mas desfavorecida. Mercedes, no solo tú te sientes perdida. En ese laberinto, como tu lo denominas, estamos muchos, muchísimos más que no encontramos la salida. En lugar de disfrutar de la justicia, tenemos que luchar contra la injusticia reinante, esto si que es un sarcasmo. No se si me habré perdido, pero he intentado razonar lo profundo de este tu estupendo trabajo. No tengo por menos que enviarte un fraternal abrazo.
ResponderEliminarMuy acertado y certero a mi entender tu visión y cercana a mi forma de pensar; al igual que tú, tampoco hablo de la justicia humana, que ya sabemos que funciona por su ausencia. Pero me alegro de saber que no ando sola en esto que yo llamo laberinto. Gracias por tu paso y huella que siempre es un abrazo de fuerza y esperanza. Abrazos mil para ti también..
EliminarAcaso esto es el cielo y los ladrones los ángeles guardianes del paraíso. Genial y acertada metáfora, mi querida Mercedes.
ResponderEliminarUn gran poema, poeta. Me encanta amiga.
Gracias José tal vez usando metáforas lo entienden mejor y su interior cambia sus neuronas.
EliminarGracias por tu paso y huella.
Un besazo maestro.
Precioso, Mercedes, pero los que tienen que entender las metáforas, no las entenderán nunca, pero a pesar de todo eso, tenemos que seguir peleando y luchando por un mundo mejor.
ResponderEliminarYa sabes la esperanza....
Besos
Muy cierto Begoña algunos no lo entenderán o tardarán en entenderlo pero seguiremos predicando en el desierto,seguro pasará alguien que anda perdido o buscándose a si mismo y le viene bien el encuentro.
EliminarBesos cielo.
Me quedo con esta estrofa, que a mi modesto entender resume y condensa un concepto que todos buscamos, aunque no encontremos, perdidos en el cavernoso interior de nuestras propias reflexiones...
ResponderEliminar"Busco, medito, converso contigo.
Me quedé perdida en tu laberinto
Sueño con un mundo justo
Pero no hay justicia en este mundo."
GENIAL!!!!
Tranquilo JotaJota, al final la justicia reinará y al injusto, su castigo.
EliminarGracias por estar.
Un beso.
Reflexión sobre la vida y lo que hay, lo malo..Lo verdaderamente criticable....Y estar, ¿seremos ángeles caídos?
ResponderEliminarSomos todo Adela, Aquí tenemos para elegir; infierno, purgatorio o cielo...ahora... con que nos quedamos!!!
Eliminarla justicia lo hacemos nosotros, somos nosotros lo que tenemos la virtud de hacer o deshacer, la paradoja del ser humano está en su propia autodestrucción y en ser su propio slvador un besote...
ResponderEliminarTodo lo hacemos nosotros Isabel, somo los responsables de nuestra vida y destino.
EliminarMuy buena tu visión.
Creemos un mundo justo...
Besazos.