Otras sombras ¡sin sol!

Desde este mundo.

Palidezco entre tus hojas torcidas.

Papel emborronado, teñido de farsa y mentiras.

Destructor de sueños, clavador de espinas.

Quieres cambiar el mundo a tu medida;
instinto superficial te cobija.

Copias bellas estructuras

te adueñas de letras, ideas, vidas, incluso fantasías.

Con sutileza, recorres valles ajenos...
esquinas y rotondas vacías,

sin dejar ver, si es blanco o negro,

ni si es diestro o siniestro,
acaparas el gris del alma que habitas.

Marcas tus pasos, disimulando tus huellas,

te expandes y revoloteas.

Solo consigues arrastrarte en todas direcciones,
acompañado de buitres que eclosionan el último día.

¡No me busques!

Corres el riesgo de encontrarte a ti mismo.

Para remover conciencias..... “Tú que eres mi maestro”

“Tú que eres mi maestro”

Me dejas perdida Entre grandes conflictos

Y Mentes turbulentas

 

Hoy, mi yo, reabre puertas

Aquellas que retornan de mi esencia.

Sepulto en el pozo del olvido

el verbo victimista y exigente

 destierro todo aquello que me hiere.

Secretos de otros cuerpos y otras mentes

 Vomito los muertos que te envuelven

Que  arrastras y paseas  por tu vida

Sin sombra, cobijo o manantial

donde lavar y sanar las heridas.

 Cambiemos el mundo

Busquemos

Allí donde la cascada esconde

La sabiduría antigua.

 Caminemos en silencio 

contemplando el paisaje

Donde solo se escuche el propio latir del corazón

Vibrando al ritmo del viento

El tenue sonido de los pajarillos

Y el delicado aleteo de las mariposas.

¡Vida!

Vida

Laberinto donde la virtud se pierde 
                    detrás de las mascaras,

la paz y la calma se esconde tras 
                                     la adversidad.

En tus ojos descubro mi imagen,

aquella que me hace fuerte 

al sentirme yo misma ante 
                                        los demás.

Dibujo mi propio holograma,

aquel que guarda instantes eternos,

memoria que brota en primavera 

justo el tiempo donde las lilas cobran vida 

y expanden su perfume. 

La flor de azahar nos besa la piel
con su dulce aroma.

¡Sé quien soy y acepto mi herencia!

El otoño me espera con los brazos abiertos

expandiendo olor a jazmines.

La caja tonta.

Para los de dentro y los de fuera.

Cada amanecer busco un dato, una cara, un lugar que me lleve a reconocer dónde estoy. Cada día miro alrededor, compruebo con tristeza, la cigüeña se equivocó de planeta.

Miro el mundo que me rodea

Observo el asfalto

Solo veo huellas de errantes pisadas

Vidas de olvido y lamentos

Tristes sentires que a nadie importan

No reconozco a los vivos de entre los muertos

Solo veo zombis haciendo cola

A la espera de regodearse en el fango...

Siguiendo el poder que otorgan aquellos que prostituyen hasta el aliento.

Decrepita sociedad

Cueva de ladrones, donde se aprecia la miseria del alma.

Dónde estáis terrícolas insensatos

Títeres de culebrón y chismorreo.

Vais poniendo zancadillas

Y en el salto os creéis más altos

Sin descubrir que al caer, tarde o temprano

os tapará vuestro propio légamo.

(Yo, ya, ni miro)

“Se equivocó la cigüeña, 

me cambió de planeta"

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"Approbare" Desde mi generación.

                                                                 

Busco

Convoco

Busco entre las huellas de mis ancestros

Centenares de pisadas de otras vidas

Aquellas que se perdieron en otro espacio

Marcando historia, aritmética y geometría

Te busco a ti, a usted, 

a todo aquel que se olvido de vivir.

o vivió marcado por condena, 

miedo, juicio, esclavitud

 estigma, dependencia, cadena o locura.

Cautiverio, reprobación, 

execración, prisión o censura,

dejando atrás nubes y sombras,  

nieblas que solo son residuo de tormentas 

ignominias de ignorancia, 

injusticia y repulsa.

Hoy te invito a ti y, a todos los eslabones, 

libero a aquellos que cargaron, o cargan escarcela 

sin percatarse siquiera.

Pues no hay sentencia ni castigo

ni tan siquiera perdón 

para lo que solo errores son...

 “Approbare” 

Comprensión, sin juicio absolución.

Hoy reina la libertad, 

 armonía, paz y amor.

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